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| Mi pequeño gran amor |
A partir de ese 25 de diciembre, ningún día ha sido igual. Mis noches se hicieron más largas y los días más cortos. Él es mágico, único. Jamás pensé que alguien que aun ni siquiera habla pudiera encontrar la forma de meterse tan dentro de mi corazón.
Gabriel, que es como se llama mi ángel, no solo ha cambiado mi rutina de siempre, sino que le ha dado vida. Porque sí, mi pequeñín es capaz de dar vida a sus cortos 11 meses. Parece tan poquito, pero para mí han sido largos agotadores meses.
No me importa tener que levantarme en las madrugadas, dormir muy entrada la noche o cambiarle los pañales. Yo con él vivo más y mejor.
Disfrutamos de nuestro tiempo juntos. Encontramos la fórmula para hacernos saber que nos amamos y nos acompañamos aunque estemos en lugares distintos.
Estoy segura que su llegada a mi vida no la cambiaría por nada, pero estoy más segura aún de que no fui yo quien le dio la oportunidad de entrara en mi vida, sino que fue él quien me dio la oportunidad de entrar en la suya.
Sé que leerás esto en unos años más y quisiera que sepas que hoy me haces feliz. Quiero que estés seguro que mamá siempre estará contigo de la forma en que Dios se lo permita y que si tuviera que dar mi vida por ti, la daría con mucho gusto.
Gracias por haberme escogido. Te amo!
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