Son 365 días los que uno tiene para elaborar planes, para cumplir hazañas, para hacer amigos y para perder otros. y es extraño que en un solo segundo pueda quedar todo en el pasado.
Este año aprendí que enamorarse es lo más difícil del mundo
y que desilusionarse de alguien puede tardar solo un minuto.
Este año aprendí que los verdaderos amigos nunca te abandonan
y que los falsos solo viven de sus insostenibles promesas.
Este año aprendí que tengo a la mejor madre del mundo
y que muchos de nosotros no sabemos valorarla.
Este año aprendí que el amor no tiene nada que ver con el sufrimiento
sino que tiene que ver con la felicidad, la fidelidad y la confianza.
Este año aprendí que un hermano es más que un integrante de una familia,
un hermano es el amigo más fiel que uno pueda tener.
Este año aprendí que una familia no solo es un grupo de personas con un mismo apellido,
una familia es el soporte de nuestras metas y sueños en la vida.
Este año aprendí que una lágrima no siempre es de tristeza,
una lágrima puede ser la señal de que alguien necesita nuestra ayuda.
Este año aprendí que el mejor regalo es un abrazo interminable
y que el peor de todos es una mentira.
Este año aprendí que un "te amo" es más que un par de palabras,
es un compromiso para toda la vida.
Este año aprendí que un "por favor" y un "gracias"
nos pueden abrir miles de corazones inseguros.
Este año aprendí que tomarse de las manos es más que un roce de pieles,
es un apoyo incondicional hasta el final de nuestras vidas.
Este año aprendí que llorar es necesario
y que reír es imprescindible.
Este año aprendí que decirle a alguien lo importante que es
puede hacerte aún más importante a ti en su vida.
Este año aprendí que la vida es como un caballo al que hay que aprender a domar
y que yo empiezo a lograrlo.
