De repente levanté mi mirada y me topé con tu nombre escrito a cincel en una lápida blanca. Sentí otra vez todos esos recuerdos en mi corazón. Sentí que cada una de las cosas que me enseñaste a hacer se me olvidaban y deseaba que me las hicieras recordar. De pronto una lágrima empezó a caer por mi mejilla. No me pude contener.
Y cómo hacerlo si una vez más me di cuenta de que no volvería a verte más. Cómo aguantar mi rabia por no poder haber contado contigo por más y más tiempo. Por qué ya no puedes moverte? por qué ya no puedo peinar tu sedoso cabello todos los días intentando hacerte un nuevo peinado para que luzcas aún más hermoso?. Sin intentarlo, tu rostro se posó una vez más en mi frágil memoria - y digo que lo es porque en verdad a veces olvido cosas que no debería-.
Sonreí sin quererlo, tus palabras y algunas sonrisas retumbaban en mis oídos; quería entenderlas, pero algunas eran confusas, inaudibles. Deseé con toda el alma volverte a ver una vez más e irme con el recuerdo de haber pasado una tarde más a tu lado. Pensé en el hecho de sentirme sola y veces hasta incomprendida por las personas que dicen amarme, y una vez más ese sentimiento de rencor hacia los demás se fue de mi mente. Lloré como hace tiempo no lo hacía por alguien a quien extraño tanto como a ti. Pensé en cómo serían las cosas si aún estuvieras a mi lado.
Pensé en qúe me dirías si yo te contara de mis repetitivos errores en la vida y qué pensarías de mi forma de vivirla. Te extrañé más que otra veces, mucho más. Sentí unas ganas enormes abrazarte y sentir tu eterna protección - eterna porque sé que me la sigues brindando aun donde estás -, sentí una infinita ansiedad por tenerte frente a mí y poder contarte de mis problemas, de esos a los que lo demás llaman insignificantes.
Y cómo hacerlo si una vez más me di cuenta de que no volvería a verte más. Cómo aguantar mi rabia por no poder haber contado contigo por más y más tiempo. Por qué ya no puedes moverte? por qué ya no puedo peinar tu sedoso cabello todos los días intentando hacerte un nuevo peinado para que luzcas aún más hermoso?. Sin intentarlo, tu rostro se posó una vez más en mi frágil memoria - y digo que lo es porque en verdad a veces olvido cosas que no debería-.
Sonreí sin quererlo, tus palabras y algunas sonrisas retumbaban en mis oídos; quería entenderlas, pero algunas eran confusas, inaudibles. Deseé con toda el alma volverte a ver una vez más e irme con el recuerdo de haber pasado una tarde más a tu lado. Pensé en el hecho de sentirme sola y veces hasta incomprendida por las personas que dicen amarme, y una vez más ese sentimiento de rencor hacia los demás se fue de mi mente. Lloré como hace tiempo no lo hacía por alguien a quien extraño tanto como a ti. Pensé en cómo serían las cosas si aún estuvieras a mi lado.
Pensé en qúe me dirías si yo te contara de mis repetitivos errores en la vida y qué pensarías de mi forma de vivirla. Te extrañé más que otra veces, mucho más. Sentí unas ganas enormes abrazarte y sentir tu eterna protección - eterna porque sé que me la sigues brindando aun donde estás -, sentí una infinita ansiedad por tenerte frente a mí y poder contarte de mis problemas, de esos a los que lo demás llaman insignificantes.
Me despedí con algo de tristeza. Quizá sentí que aunque el lugar de nuestro encuentro era bastante frío había servido para sentirme más tranquila y haberme llenado de esa energía que sólo tú me puedes brindar. No tengo idea de dónde estés ahora. Sé que es mejor que en donde estoy yo, pero igual quisiera que estés aquí conmigo.
Discúlpame por no tener la fortaleza suficiente para enfrentarme a tantos por lo que quiero. Tengo miedo, y lo sabes. Siento la necesidad de aferrarme a alguien cuando siento que ya estoy perdiendo una vez más a alguien irreemplazable. No dejes de escucharme como hasta ahora, quizá te cuente cosas superfluas, pero son importantes para mí, a quién se las contaría si no es a ti??..
Discúlpame por no tener la fortaleza suficiente para enfrentarme a tantos por lo que quiero. Tengo miedo, y lo sabes. Siento la necesidad de aferrarme a alguien cuando siento que ya estoy perdiendo una vez más a alguien irreemplazable. No dejes de escucharme como hasta ahora, quizá te cuente cosas superfluas, pero son importantes para mí, a quién se las contaría si no es a ti??..